Diosa del Sol

Puedo decir que éste fin de semana lo disfruté en cantidad.   Vestida de rojo fui a cenar con mi amado y con mis hijos a mi restaurante favorito.  La comida siempre exquisita sin dejar de mencionar las bebidas.  PERO,  la compañía,  era lo mejor del día.   Cómo me hacen reír con sus ocurrencias.  Cómo me concienten, cómo me conocen.

El domingo lo pasamos disfrutando del paisaje del campo.  Estábamos con los nenes y con nuestra familia extendida, una de nuestras parejas más queridas.  Más que amigos,  son familia.  Como gozamos planeado para el futuro. Disfrutando de nuestros vinos favoritos.  Deleitándonos con queso, pan y nueces.  Y para completar, burlandonos de nuestra reacción al probar mostaza picante.  Qué locura tan rica.

El clima, digamos que ha brincado de estaciones porque la temperatura estaba caliente,  como si fuera verano.   Conste, no me estoy quejando.

Pasamos toda la tarde en la bodega,  hasta que cerraron.  Cierto el dicho: "el tiempo pasa volando cuando una se divierte".

Ni modos, de ahí nos fuimos a comer pescado.  Creo que casi todos pedimos lubina y probamos un poquito de cada uno de nuestros platos.  Yo lo ordené con salsa de mangó.   Gina con salsa con un toque de chinita.  Diego con salsa de pesto.  Sin embargo,  el único que no quiso compartir de su plato fue  Chris que ordenó una rica tuna.  Pero como relajamos.  Hay que repetir la ocasión.

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Casi las cuatro de la madrugada y mis ojos están alertas.   Estoy rodeada por mis amores.  Por mi persona favorita.  Por mi Viggo calentandome los pies.  Mi Chanel sobre una de mis almohadas.   Y mi eterno bebé,  Chewbaca, cerca de mi cintura roncando.  Además,  la lluvia me está remontando a mi playa.  Está lloviendo fuerte.  Quizás llorando porque no nos dejó ver la luna roja.

Hoy tuve la oportunidad y suerte de soñar profundo.  Con la certeza de saber que todo iba a salir bien. Dios me llenó el corazón de paz y me dejó saber que de ésta batalla iba a salir bien.   Lo que son las operaciones. ..

No se crean, fue fuerte.  De momento,  en la camilla lágrimas comenzaron a mojar mi rostro.  La mochila cargada de miedo me quería lastimar.  Entre mi persona favorita, y las enfermeras que considero angeles, pusieron sobre mi frente una toallita humeda.  Utilizando mis ejercicios de visualización,  me transporté.  Me fui a mi playa con Cuchucu y comenzé a escuchar su risa.  Sentí sus manos sobre mi cabeza y vi su rostro con sus ojos alegres.  Escuché que me decía: "no te preocupes por nada, tranquila Evelyncita,  confía en que Dios está contigo".  Escuchaba las olas, olía su olor y sentía el calor del sol.  "Bebé, Bebé abre los ojos" desperté más ya mi llanto no era de miedo.  Mi corazón se desborda lleno de agradecimiento con Dios por no borrar esos recuerdos de mi vida.  Gracias mi Dios.  No puedo pedirte más porque Tu llenas mi corazón y mis dias con paz y esperanza.

Luego mi día estuvo lleno de besos de mimos y de sueño.   Quizás por eso es que aun mi tren no llega.
Tendré que ir a la estación a buscarlo.

A todos los que han estado al pendiente,  les envío una sonrisa y un abrazo lleno de agradecimiento.   Los quiero y gracias por compartir mis momentos.  Los cuales están llenos de locura,  de ternura,  de optimismo pero son los míos.   Aprendí a pintar mi mundo de colores alegres.  Y la adversidad no puede borrar mi sonrisa.

Con mi persona favorita

mi Mai Tai

Chis, Gina,  Diego y yo

Gina,  Sebastian y yo

                Y por qué no,  la diosa del Sol

                           Gracias Chris por

                      ésta foto tan especial

Mi Cuchucu

gracias por siempre estar

Sol, besos,  abrazos y sonrisas auténticas! !!